El agua es un nutriente crítico para la homeostasis celular y la vida1, su ausencia sería letal en cuestión de días1. Es el mayor componente del cuerpo humano, representando 60% del peso corporal del adulto2. Los beneficios de su consumo diario son: hidratación, mejor calidad de la piel y funciones esenciales como cognitiva, digestiva, metabólica, renal, termorreguladora, cardiaca, respuesta hemodinámica, equilibrio hidroeléctrico, transporte de nutrientes, eliminación de desechos, entre otros3.
La ingesta adecuada de agua es la que cubre las necesidades de todos los individuos sanos en los distintos grupos de la población. Esta recomendación se establece para prevenir los efectos nocivos de la deshidratación, que incluyen anomalías metabólicas y funcionales4. La Food and Nutrition Board de la National Academies of Sciences, Engineering, and Medicine, de los Estados Unidos de Norteamérica (EEUU), señala como ingesta diaria adecuada de agua entre 2,3 y 3,7 L/día para adultos5. La Organización Mundial de la Salud (OMS) promueve una ingesta de 2 L/día6. Esta ingesta varía según país, hábitos alimentarios, estilos de vida y condiciones ambientales6. Por ejemplo, la ingesta promedio diaria en adultos en España es de 1,65 L/día7; Japón, 2,2 L/día8; Australia, 2,5 L/día9; Alemania, 2,4 L/día10 y EEUU entre 2,8 y 3,8 L/día11. En Chile, el Ministerio de Salud (MINSAL), mediante los mensajes de las guías alimentarias basadas en alimentos, recomienda la ingesta de agua diaria (RIAD) de 6 a 8 vasos/día en adultos, equivalentes a 1,5-2,0 L/día12. La Encuesta Nacional de Consumo Alimentario chilena (ENCA 2010) reportó que solo 8,8% de la población cumplía con la RIAD13,14.
Por lo anterior, el objetivo de este trabajo fue caracterizar el consumo de agua, según variables sociodemográficas, antropométricas y de estilos de vida, en población adulta chilena.
Metodología
Diseño del estudio
Estudio observacional de corte transversal, que incluyó a 5.520 participantes ≥ 15 años, de la Encuesta Nacional de Salud realizada entre los años 2016 y 2017 (ENS 2016-2017), que tenían información del consumo de agua y variables sociodemográficas, antropométricas y de estilos de vida. El total de participantes equivale a una muestra expandida de 14.518.969 chilenos de ambos sexos.
La ENS 2016-2017 implementó un muestreo aleatorio estratificado para reclutar participantes de áreas rurales y urbanas con una distribución equitativa aproximada. La ENS 2016-2017 fue financiada por el MINSAL y aprobada por el Comité Ético Científico de la Facultad de Medicina de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Todos los participantes dieron su consentimiento informado por escrito antes del comienzo del estudio15. Los datos utilizados en este trabajo fueron solicitados al MINSAL, según el protocolo establecido.
Consumo de agua
La ingesta diaria de agua fue evaluada a través de la pregunta: ¿Cuántos vasos de agua al día consume usted?, cumpliendo la recomendación de consumo de agua, el individuo que declaró consumir ≥ 6 vasos de agua/día, cada uno de 0,25 L16. Para evaluar el cumplimiento de la recomendación, los participantes fueron divididos en grupos según características sociodemográficas, antropométricas y de estilos de vida.
Variables sociodemográficas y de estilos de vida
Fueron recolectadas utilizando cuestionarios previamente validados, por la ENS 2016-201717. Las variables fueron: edad, sexo, área geográfica, nivel educacional y nivel socioeconómico (NSE)18. Otras variables consideradas fueron ocupación, estado civil, nivel educacional del jefe de hogar y nivel educacional de la pareja del jefe de hogar y presencia de niños en el hogar.
Los datos de estilos de vida se recopilaron mediante cuestionarios para las siguientes variables: seguir un plan de alimentación, hábito tabáquico, percepción de salud y horas de sueño. El consumo de alcohol se recopiló mediante el cuestionario “Prueba de identificación de trastornos por consumo de alcohol” (AUDIT), desarrollado por la OMS20. Se usó una puntuación AUDIT < 8 como puntaje sin riesgo y ≥ 8 como punto de corte para el consumo de riesgo19. Para medir la actividad física (AF), se utilizó el Cuestionario de actividad física global (GPAQ v2)20. La AF fue expresada en MET/min/día total y fue evaluada en tres dimensiones, en actividades de transporte, en el trabajo y tiempo libre21.
Variables antropométricas
La medición del peso y la talla corporal fueron realizadas mediante métodos estandarizados, tal como ha sido reportado anteriormente17,23. El estado nutricional se clasificó según índice masa corporal (IMC) en base a las recomendaciones de la OMS para adultos24. La obesidad central fue definida por circunferencia de cintura (CC) ≥ 88cm en mujeres y ≥ 102 cm en hombres15,23.
Análisis estadístico
Se utilizó el programa STATA MP v16 (StataCorp; College Station, TX) y el comando de “svyset” para muestras complejas. Los resultados fueron estimados utilizando muestras expandidas acorde a factores de expansión sugeridos por la ENS 2016-2017. Los análisis fueron ponderados por el diseño de la encuesta. Las características descriptivas de la cohorte se presentan como medias o proporción con intervalos de confianza del 95% (IC del 95%) para las variables continuas y categóricas, respectivamente.
Para investigar asociaciones entre el consumo de agua y factores sociodemográficos, antropométricos y de estilos de vida, se realizaron análisis de regresión logística con resultados presentados como Odds ratio (OR) con 95% IC. Para determinar la probabilidad de cumplir la RIAD se utilizó como grupo de referencia a aquellas personas que reportaron consumir < 6 vasos de agua al día. Por lo que un OR > 1 sugiere una mayor probabilidad de cumplir con la RIAD mientras que un OR < 1 indica una menor probabilidad de cumplir con la RIAD.
Los análisis estadísticos se ajustaron de forma incremental mediante factores de confusión, incluidos en tres modelos estadísticos: Modelo 1- no ajustado; Modelo 2- ajustado solo por variables sociodemográficas (edad, sexo y nivel educacional); Modelo 3- ajustado por el modelo 2 más las variables IMC y AF, cuando estas no fueron las variables de exposición. Para evitar colinealidad (sobre ajustar el modelo cuando la variable independiente y de ajuste están altamente correlacionadas entre sí), el NSE no fue ajustado por educación en ninguno de los modelos. El nivel de significancia fue definido como p < 0,05.
Resultados
Las características de los participantes según cumplimiento de la RIAD se muestran en la Figura 1 y Tabla 1. Con relación al consumo de ≥ 6 vasos de agua al día, solo el 27,8% [95% IC: 25,6; 29,9] de los participantes cumplía con la RIAD. La prevalencia de consumo de ≥ 6 vasos de agua al día por grupo etario y sexo se presenta en la Figura 1. El 31,0% de los hombres [95% IC: 27,7; 34,4], el 24,5% [95% IC: 21,9; 27,3] de las mujeres cumplía con la RIAD. Con relación a la edad, los adultos mayores de 80 años presentaron una menor proporción de cumplimiento de la RIAD, respecto de los < 20 años (Figura 1).
Características | No cumplían (< 6 vasos/día) | Cumplían (≥ 6 vasos/día) | |
---|---|---|---|
Participantes encuestados n (%) | 3.986 (72,2) | 1.534 (27,8) | |
Muestra expandida n (%) | 10.482.696 (72,2) | 4.036.273 (27,8) | |
Sexo | |||
Hombre (%) | 46,90 [44,13; 49,66] | 54,90 [50,38; 59,35] | |
Mujer (%) | 53,1 [50,33; 55,86] | 45,1 [40,64; 49,61] | |
Edad (años) | 43,93 [42,96; 44,89] | 41,38 [40,02; 42,74] | |
Peso corporal (kg) | 74,49 [73,67; 75,31] | 78,24 [76,74; 79,74] | |
Talla (m) | 1,62 [1,61; 1,63] | 1,64 [1,64; 1,65] | |
IMC (kg/m2) | 28,38 [28,09; 28,66] | 28,92 [28,46; 29,37] | |
Circunferencia cintura (cm) | 92,92 [92,17; 93,66] | 94,19 [92,97; 95,40] | |
Área geográfica | |||
Urbana (%) | 88,90 [87,56; 90,16] | 89,30 [87,17; 91,07] | |
Rural (%) | 11,10 [98,30; 124,34] | 10,70 [8,9; 12,82] | |
Escolaridad (años) | 10,74 [10,52; 10,96] | 11,46 [11,14; 11,78] | |
Nivel educacional | |||
Básico (≤ 8 años) (%) | 18,50[16,62; 20,50] | 11,20 [9,17; 13,56] | |
Medio (9-12 años) (%) | 54,80[52,04; 57,53] | 58,90 [54,24; 63,34] | |
Superior (> 12 años) (%) | 26,70 [24,2; 29,36] | 29,90 [25,64; 34,63] | |
Nivel socioeconómico | |||
Bajo (%) | 27,30 [24,96; 29,74] | 23,30 [19,79; 27,16] | |
Medio (%) | 32,30 [29,50; 35,10] | 33,10 [28,5; 37,95] | |
Alto (%) | 40,40 [37,44; 43,52] | 43,60 [38,46; 48,7] | |
Actividad física | |||
Inactivo (%) | 26,60 [24,28; 28,92] | 22,70 [19,18; 26,65] | |
Activo (%) | 73,40 [71,07; 75,71] | 77,30 [73,34; 80,81] | |
Tiempo sentado (h/día) | 3,45 [3,29; 3,61] | 3,37 [3,09; 3,65] | |
Vaso de agua día (% cumplimiento) | 72,20 [70,01; 74,29] | 27,80 [25,70; 29,98] | |
Consumo de alcohol según AUDIT | |||
Sin riesgo (< 8 puntos) (%) | 64,30 [61,71; 66,85] | 68,20 [64,05; 72,06] | |
Consumo de riesgo (≥ 8 puntos) (%) | 35,70 [33,15; 38,29] | 31,80 [27,95; 35,95] | |
Hábito tabáquico | |||
Fumador regular (%) | 22,70 [20,37; 25,20] | 28,30 [24,29; 32,368] | |
Fumador ocasional (%) | 7,90 [6,47; 9,48] | 9,60 [6,94; 13,13] | |
Exfumador (%) | 25,30 [22,99; 27,76] | 27,00 [23,01; 31,32] | |
Nunca ha fumado (%) | 44,10 [41,47; 46,85] | 35,11 [31,07; 39,38] | |
Percepción salud | |||
Mala (%) | 2,30 [1,65; 3,22] | 1,10 [0,68; 1,82] | |
Regular (%) | 22,80 [20,60; 25,09] | 20,00 [16,60; 23,81 | |
Buena (%) | 74,90 [72,52; 77,16] | 78,90 [75,04; 82,31] | |
Horas de sueño | |||
≤ 6 h/día (%) | 22,50 [20,25; 24,98] | 23,70 [20,05; 27,80] | |
7-8 h/día (%) | 51,90 [49,12; 54,60] | 52,60 [47,98; 57,09] | |
≥ 9 h/día (%) | 25,60 [23,3; 280,3] | 23,70 [20,07; 27,81] |
Datos presentados como media y su 95% IC para variables continuas y como porcentaje (%) y su 95% IC para variables categóricas. Todos los valores fueron corregidos por el factor de expansión sugerido por la ENS 2016-2017.
En la Tabla 2 se presenta la asociación entre el cumplimiento de la RIAD y las características sociodemográficas, antropométricas y de estilos de vida de la ENS 2016-2017. En el Modelo 1, se destaca que presentaron menor probabilidad de cumplir con la RIAD las mujeres respecto de los hombres; personas > 56 años en comparación a aquellos con una edad < 37 años; las dueñas de casa y los jubilados, ambos en comparación a personas laboralmente activas; los viudos/as en comparación a personas casadas; y los no fumadores en comparación a fumadores regulares (Tabla 2). De estos segmentos de la población, presentaron la menor probabilidad de cumplir con la RIAD las personas jubiladas [OR: 0,38 (95% IC: 0,28; 0,51)] y personas > 56 años [OR: 0,56 (95% IC: 0,43; 0,74)] (Tabla 2). Al contrario, los que presentaron una mayor probabilidad de cumplir la RIAD fueron las personas que convivían en comparación de los casados; personas con nivel educacional medio o superior, ambos en comparación al nivel básico; los participantes que declararon seguir un plan de alimentación en comparación a los que no lo seguían y aquellos que reportaron un buen estado de salud, respecto a los que no lo presentaban. Entre estos segmentos de la población, los que presentaron la mayor probabilidad de cumplir la RIAD fueron las personas que reportaron tener un buen estado de salud [OR: 2,16 (95% IC: 1,18; 3,97)], personas que seguían un plan de alimentación [OR: 1,85 (95% IC: 1,43; 2,39)], y aquellos con nivel de educación superior [OR: 1,85 (95% IC: 1,35; 2,54)] (Tabla 2). Tras ajustar estos análisis por variables sociodemográficas, IMC y AF, las asociaciones reportadas disminuyeron levemente su magnitud de asociación. Sin embargo, se mantuvieron significativas, excepto para las variables ocupación: dueña casa; estado civil: viudo y convive; y nivel educacional de la pareja del jefe de hogar: nivel medio, las cuales perdieron su nivel de significancia (Figura 2 y Tabla 2).
Modelo 1 | Modelo 2 | Modelo 3 | ||||||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
OR [95% IC] | p | OR [95% IC] | p | OR [95% IC] | p | |||||
Sexo | ||||||||||
Masculino (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Femenino | 0,72 | [0,58; 0,89] | 0,003 | 0,74 | [0,59; 0,91] | 0,006 | 0,73 | [0,59; 0,90] | 0,004 | |
Edad | ||||||||||
< 37 años (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
37-56 años | 0,88 | [0,69; 1,12] | 0,321 | 0,93 | [0,72; 1,20] | 0,382 | 0,89 | [0,68; 1,15] | 0,382 | |
> 56 años | 0,56 | [0,43; 0,74] | < 0,001 | 0,62 | [0,46; 0,84] | 0,001 | 0,60 | [0,44; 0,82] | < 0,001 | |
Estado civil | ||||||||||
Casado (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Convive (con o sin acuerdo) | 1,47 | [1,04; 2,07] | 0,027 | 1,29 | [0,90; 1,84] | 0,152 | 1,29 | [0,90; 1,88] | 0,152 | |
Divorciado/separado/anulado | 1,10 | [0,74; 1,65] | 0,608 | 1,20 | [0,80; 1,80] | 0,260 | 1,26 | [0,84; 1,89] | 0,260 | |
Viudo | 0,61 | [0,42; 0,89] | 0,011 | 0,81 | [0,54; 1,21] | 0,387 | 0,83 | [0,55; 1,25] | 0,387 | |
Soltero | 0,99 | [0,77; 1,28] | 0,981 | 0,80 | [0,59; 1,08] | 0,249 | 0,83 | [0,61; 1,13] | 0,249 | |
Niños en el hogar | ||||||||||
Niños (No) (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Niños (Si) | 0,98 | [0,75; 1,28] | 0,910 | 0,98 | [0,74; 1,29] | 0,740 | 0,95 | [0,72; 1,25] | 0,740 | |
Nivel educacional | ||||||||||
Básico (< 9 años) (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Medio (9-12 años) | 1,77 | [1,36; 2,31] | < 0,001 | 1,61 | [1,19; 2,19] | 0,002 | 1,63 | [1,20; 2,22] | 0,002 | |
Superior (> 12 años) | 1,85 | [1,35; 2,54] | < 0,001 | 1,63 | [1,14; 2,33] | 0,005 | 1,66 | [1,16; 2,38] | 0,005 | |
Nivel educacional jefe de hogar | ||||||||||
Básico (< 9 años) (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Medio (9-12 años) | 1,14 | [0,74; 1,76] | 0,545 | 1,13 | [0,72; 1,78] | 0,589 | 1,13 | [0,72; 1,78] | 0,589 | |
Superior (> 12 años) | 1,29 | [0,75; 2,22] | 0,354 | 1,27 | [0,73; 2,19] | 0,382 | 1,27 | [0,73; 2,21] | 0,382 | |
Nivel educacional pareja jefe de hogar | ||||||||||
Básico (< 9 años) (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Medio (9-12 años) | 1,57 | [1,02; 2,42] | 0,041 | 1,43 | [0,91; 2,22] | 0,113 | 1,48 | [0,94; 2,33] | 0,085 | |
Superior (> 12 años) | 1,65 | [0,96; 2,83] | 0,067 | 1,47 | [0,84; 2,57] | 0,170 | 1,58 | [0,89; 2,80] | 0,110 | |
Nivel socioeconómico | ||||||||||
Bajo (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Medio | 1,20 | [0,90; 1,59] | 0,200 | 1,14 | [0,85; 1,51] | 0,380 | 1,16 | [0,86; 1,54] | 0,329 | |
Alto | 1,26 | [0,95; 1,66] | 0,095 | 1,13 | [0,85; 1,50] | 0,413 | 1,14 | [0,85; 1,52] | 0,376 | |
Ocupación | ||||||||||
Trabajador (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Dueña de casa | 0,71 | [0,52; 0,96] | 0,030 | 0,85 | [0,60; 1,21] | 0,330 | 0,84 | [0,59; 1,19] | 0,330 | |
Estudiante | 0,76 | [0,53; 1,09] | 0,139 | 0,70 | [0,46; 1,05] | 0,169 | 0,74 | [0,49; 1,13] | 0,169 | |
Jubilado | 0,38 | [0,28; 0,51] | < 0,001 | 0,48 | [0,33; 0,70] | < 0,001 | 0,49 | [0,33; 0,71] | < 0,001 | |
Área geográfica | ||||||||||
Urbana (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Rural | 0,96 | [0,75; 1,23] | 0,776 | 1,07 | [0,83; 1,39] | 0,738 | 1,04 | [0,80; 1,35] | 0,738 | |
Actividad física | ||||||||||
Inactivo (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Activo | 1,22 | [0,96; 1,56] | 0,097 | 1,11 | [0,86; 1,42] | 0,382 | 1,11 | [0,87; 1,43] | 0,382 | |
Horas sentado | ||||||||||
< 4 h (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
≥ 4 h | 1,14 | [0,88; 1,48] | 0,304 | 1,22 | [0,93; 1,58] | 0,138 | 1,20 | [0,92; 1,56] | 0,175 | |
Plan de alimentación | ||||||||||
No (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Sí | 1,85 | [1,43; 2,39] | < 0,001 | 1,96 | [1,50; 2,55] | < 0,001 | 1,87 | [1,42; 2,46] | < 0,001 | |
Consumo de alcohol | ||||||||||
Sin riesgo (< 8 puntos) (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Consumo de riesgo (≥ 8 ptos.) | 0,84 | [0,67; 1,04] | 0,117 | 0,91 | [0,73; 1,15] | 0,467 | 0,93 | [0,74; 1,16] | 0,537 | |
Hábito tabáquico | ||||||||||
Fumador regular (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Fumador ocasional | 0,98 | [0,62; 1,53] | 0,933 | 0,94 | [0,60; 1,49] | 0,815 | 0,93 | [0,59; 1,48] | 0,789 | |
Exfumador | 0,85 | [0,63; 1,15] | 0,311 | 0,91 | [0,67; 1,25] | 0,580 | 0,90 | [0,66; 1,24] | 0,545 | |
Nunca ha fumado | 0,63 | [0,48; 0,83] | < 0,001 | 0,67 | [0,51; 0,89] | 0,006 | 0,68 | [0,51; 0,91] | 0,009 | |
Percepción de salud | ||||||||||
Mala (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
Regular | 1,80 | [0,95; 3,40] | 0,068 | 1,70 | [0,89; 3,24] | 0,107 | 1,82 | [0,94; 3,50] | 0,073 | |
Buena | 2,16 | [1,18; 3,97 | 0,012 | 1,86 | [1,00; 3,45] | 0,048 | 1,99 | [1,06; 3,72] | 0,031 | |
Horas de sueño | ||||||||||
7-8 h/día (Ref.) | 1,00 | 1,00 | 1,00 | |||||||
≤ 6 h día | 1,03 | [0,79; 1,35] | 0,782 | 1,06 | [0,81; 1,39] | 0,661 | 1,06 | [0,81; 1,39] | 0,634 | |
≥ 9 h día | 0,91 | [0,70; 1,18] | 0,500 | 0,93 | [0,71; 1,22] | 0,636 | 0,96 | [0,73; 1,26] | 0,792 |
Referencia (Ref.). Cumplimiento recomendación ingesta de agua (> 6 vasos de agua al día). Datos representados como odds ratio (OR) y su respectivo 95% IC. Modelo 1 no ajustado, Modelo 2 ajustado por variables sociodemográficas (edad, sexo y nivel educacional) y Modelo 3 ajustado por el Modelo 2 más las variables: IMC y AF. Para evitar colinealidad, es decir, sobre ajustar el modelo cuando la variable independiente y de ajuste están altamente correlacionadas entre sí, nivel socioeconómico no fue ajustado por educación en ninguno de los modelos
Discusión
El agua es un nutriente esencial para el ser humano, por lo que la regulación del balance hídrico es fundamental para el mantenimiento de la salud y la vida25. Este trabajo tuvo por objetivo caracterizar el consumo de agua a través del cumplimiento de la ingesta diaria de ≥ 6 vasos (1,5 L o más), según variables sociodemográficas, antropométricas y de estilos de vida, en población adulta chilena. Este estudio evidenció que 27,8% de la población cumplía con la RIAD y que los hombres tuvieron un consumo superior de agua (9,81% más que las mujeres). En relación al cumplimiento de la RIAD según sexo, un estudio realizado en tres países europeos reportó un consumo promedio de 2,75 L/día, los hombres consumían 14,9% más de agua que las mujeres26. Otro estudio, realizado a partir de la Encuesta Nacional de Salud de Australia, informó un consumo promedio de agua de 2,45 L/día, los hombres consumían 13% más de agua que las mujeres9. En ambos estudios se reportó mayor consumo de agua en los hombres, resultados similares a lo encontrado en este estudio. Lo anterior podría deberse a que los hombres son menos sedentarios y tienen distinta composición corporal que las mujeres, lo que estimularía la sensación de sed y el mayor consumo de agua15. Resultados disímiles reportó un estudio realizado en EEUU, en el que las mujeres tenían una ingesta levemente mayor de agua de 1,26% en relación a los hombres, el consumo promedio de agua de los participantes fue de 0,99 L/día (4,22 vasos/día)27.
En relación con la edad, en este estudio, los adultos > 56 años tenían menor probabilidad de cumplir la RIAD, incluso tras ajustar por variables de confusión. Resultados similares evidenció un estudio realizado en 13 países europeos, observándose que, en la mayoría de los países, las personas > 50 años eran quienes tenían un menor cumplimiento de la ingesta recomendada de agua para cada país28.
Tener un nivel educacional medio y superior se asoció a mayor probabilidad de cumplir la RIAD en los 3 modelos, respecto a quienes tenían un nivel educacional bajo. Resultados similares reportó un estudio realizado en Francia, cuyo objetivo fue examinar la asociación entre el consumo de agua potable y la calidad de la dieta; evidenciando que los participantes con nivel educacional medio cumplían en mayor proporción la recomendación de consumo de agua3. Lo mismo sucede en nuestra investigación con el NSE medio y alto, lo que podría suponer que las personas de estos grupos tienen mayor nivel de conocimientos y conciencia sobre los beneficios del consumo de agua.
Por otra parte, las personas jubiladas reportaron la menor probabilidad de cumplir la RIAD en los 3 modelos, respecto a trabajadores. Lo anterior podría significar que las personas mayores presentan un compromiso de los mecanismos homeostáticos, traduciéndose en la pérdida de la sensación de sed, dando resultado una insuficiente ingesta para reponer su déficit de agua corporal1,29. Resultados similares presentó un estudio realizado en Polonia en personas entre 60 y 90 años, quienes reportaron que el 63% de los participantes no cumplieron con la recomendación de ingesta de agua de 2,0 L/día30.
En este estudio, los participantes que seguían un plan de alimentación reportaron una probabilidad mayor de cumplir la RIAD. Al respecto, una revisión sistemática, que tuvo por objetivo determinar la asociación entre el consumo de agua y la reducción de peso corporal en adultos, reportó que las personas que seguían un programa de alimentación para perder peso corporal tuvieron un mayor consumo de agua31. Similares resultados se obtuvieron en un estudio realizado en Francia, este reportó que para ambos sexos el consumo de agua se asoció con una mejor calidad de la dieta3. Sin embargo, una revisión sistemática evidenció que la ingesta de agua para bajar de peso podría ser efectiva, pero la evidencia de su eficacia es limitada32. No obstante, en esta investigación los participantes que cumplían con la RIAD tenían un mayor IMC.
Los participantes que nunca han fumado presentaron la menor probabilidad de cumplir la RIAD, respecto del fumador regular. Resultados disímiles reportó una investigación basada en la Encuesta de Salud y Nutrición de China, la cual concluyó que la ingesta de agua no se asoció con el hábito tabáquico33.
Finalmente, los participantes de este estudio que reportaron un buen estado de salud presentaron mayor porcentaje de cumplimiento de la RIAD. Un estudio realizado en Francia reportó que un aumento diario de la ingesta de agua condujo a una mejora significativa del estado de ánimo en los bebedores habituales, quienes informaron, además, menos fatiga34.
Fortalezas y limitaciones
Una de las principales fortalezas del presente estudio es la utilización de datos de la ENS 2016-2017, encuesta representativa de la población a nivel nacional. Como limitaciones del estudio, se identifica el autorreporte de la ingesta de agua, lo que podría inducir a error en la estimación del consumo al identificarse solo vasos consumidos y no agua total consumida (agua de preparación e intrínseca de los alimentos). Finalmente, la naturaleza transversal del estudio no permite extraer ninguna inferencia causal de los resultados.
Conclusión
Un bajo porcentaje de la población chilena cumplía con la RIAD. Los participantes que tuvieron menor probabilidad de cumplir fueron las mujeres, > 56 años, dueñas de casa, jubilados, viudos y quienes reportaron nunca haber fumado. Sin embargo, participantes que convivían, con nivel educacional medio y superior, con educación nivel medio de la pareja del jefe de hogar, con plan de alimentación y con buen estado de salud y bienestar, presentaron una mayor probabilidad de cumplir la RIAD.
En este contexto, fortalecer las estrategias gubernamentales para promover la ingesta de ≥ 6 vasos de agua diaria en los grupos de población que no cumplen la recomendación, a través de todo el curso de vida, podría ser útil para mejorar la salud y la calidad de vida de las personas en Chile.